Reflexión: No a la resignación

Hay días en los que sueles pensar mucho en lo que estás haciendo, en si estás trabajando por tus sueños o estás dejando pasar la vida. Cuando esto último es lo que ocupa tu mente vienen a ti miles de voces interiores que te dicen: "no a la resignación"; es que, aunque tu familia y el mundo entero te digan que tienes que resignarte y llevar una vida "normal" como todos los demás, eso no es lo quieres hacer, nunca has sido conformista y siempre has querido ir por más. A pesar de que a veces sientas que todo gira en contra de tus planes, sabes que no debes desfallecer.




Una cosa es estarse quejando todo el tiempo y ser desagradecida, pero otra muy diferente es "sufrir en silencio", que a veces es necesario, para no llenar de malas vibras a los demás; ahí es donde llega un punto en el que estallas y quieres gritarle al mundo que, aunque todo está bien, no es como quieres.

Hace 5 años, ¿pensaste que estarías donde estás y haciendo lo que haces? Si es así o mejor, felicitaciones; si no, bienvenida al club de las que queremos llevar una vida más emocionante y cumplir todos nuestros sueños. Aunque el tiempo pase y sientas que estás vieja para hacer muchas de las cosas que quieres, aunque ya tus amigos sean menos porque decidieron iniciar la típica vida en familia, no te rindas porque, al final, si no lo logras te alegrarás de que al menos lo intentaste. 

Si la realidad es otra, tus deudas y compromisos no te dejan avanzar y sientes que te estás alejando de lo que anhelas, empiezas a buscar una y otra solución para obtener lo que quieres, pero en el futuro próximo parece que nada cambiará; es muy probable que desanimes y quieras salir corriendo, dejar todo lo que te ata y empezar de nuevo en otro lugar. Entonces, ¿cómo luchar por la vida que quieres? 

Quizás es cuestión de paciencia, todo debe llegar cuando debe llegar, tal vez hay que hacerle caso a esa voz interior que también te dice: "no desesperes, vive tranquila y todo vendrá", porque al final si obras bien todo lo demás llegará por añadidura. Eso es, vivir tranquila y con optimismo ya que tampoco puedes llevar tu presente lleno de amargura, eso no es sano para nadie; así que queda el luchar para que en unos años puedas estar donde siempre has querido estar.





CONVERSATION

0 ya son Blogger@s:

Publicar un comentario

Todo comentario que no tenga relación con el post o sobrepase los límites de la libre expresión, será moderado y no saldrá publicado.

Back
to top