Series que no envejecieron bien: SEX AND THE CITY

La excelente entrada anterior de nuestra nueva integrante thebigC (BIENVENIDA!) me dio para pensar algunas cosas sobre nuestras ilusiones románticas de la adolescencia. Que tal como dijo LMM entre los comentarios de dicha entrada, los 16 años era una edad donde nos pasaba de todo, pero que en realidad la mayoría de los “dramas”, vistos con los lentes de la edad, no eran tan complicados.

Muchas cosas que creímos el fin del mundo ahora ni las procesamos como problemas. Y otras, que nos hacían cantar como locas con las amigas o en la ducha de pura felicidad, se ven ahora insignificantes, pequeñitas y hasta nos da un poquito de vergüenza reconocer que le dedicábamos nuestro tiempo (y nuestro escaso dinero).

Uno de esos placeres culpables de aquellos años que muchas venerábamos como la BIBLIA de relaciones y estándar aspiracional del buen vivir femenino fue la serie Sex and the City. Aparte de lo “pituflais” que era la sola idea de vivir en Nueva York, el hecho de que existiera una serie que retratara tal experiencia desde las relaciones sentimentales y por sobre todo sexuales de 4 tipos distintos de mujeres (TODAS exitosas en su oficio, en trabajos que siempre van a sonar winner para la mayoría de la gente) daba para deleitarse por horas después de cada capítulo.

Todas sonríen menos "ella", la "especial".


¿Quién que vio la serie no fantaseó con irse a vivir sola a lo Carrie Bradshaw, en su departamento con montones de zapatos y una vida creativa y “top” con un laptop al lado de una ventana que daba a la gran ciudad? ¿O ser cuando grande tan segura y divertida sexualmente como Samantha, quien siempre tenía algo osado que decir? De hecho, estos dos personajes eran los que las fans de la serie más admiraban, relegando a un segundo lugar a la exitosa y trabajadora abogada Miranda Hobbes y la ensoñadora y más conservadora Charlotte York. Mal que mal, estas “pobres” dos mujeres, a diferencia de sus contrapartes más desinhibidas encarnadas en Carrie y Samantha,  eran usualmente víctimas de relaciones menos que satisfactorias en el plano sexual, teniendo la mayoría de las veces que padecer humillaciones y desencuentros en relación a sus ideales de  profesional exitosa y dueña de casa acomodada.

Total, ¿Qué valor tiene para una adolescente light querer una familia bien constituida y una carrera profesional ultra exitosa si se les compara con tener un clóset de ensueño y aventuras sexuales casi de ciencia ficción? La satisfacción instantánea que brinda una prenda top o explorar cada pose del Kamasutra significan menos esfuerzo que dedicarle una vida a cimentar un trabajo estable y de renombre o mantener en el tiempo, y con un mismo hombre, lazos de compromiso, bienestar y respeto. 

Pero al acercarme a los 30, pensar en vivir dichas fantasías adolescentes a esta edad no es tan glamoroso como pensaba. Con lo que respecta al ahora muy impopular personaje de Carrie Bradshaw (basta poner I HATE CARIE BRADHSAW en Google para encontrar decenas de sitios dedicados basurear a mi ex heroína de la adolescencia) está claro que el amor muchas veces es ciego y no tiene misericordia, pero lo de Carrie rayaba en lo absurdo y patético.

¿ Qué tiene de top desvivirse por un hombre cruel e inconstante como era el “hombre de su vida” que nos presentó la serie, Mr. Big? ¿ Qué clase de insatisfacción crónica te haría quejarte hasta el cansancio de las malas pasadas de ese “The One” y, a la primera oportunidad de ser feliz con un hombre que de verdad te ama ( Aidan), te respeta, más encima el medio mino, te aguanta todas tus leseras hasta las que no te aguantas tu misma, lo tiras todo por la borda con tal de “sentir el drama” que ese otro hombre nefasto te proporcionaba? ¿Qué importa si a tu amiga la dejó el marido, que otra sea madre soltera o que tenga cáncer? Que el mismo tipo de hace chorromil años que no te pesca no te devolvió el llamado es un tema de conversación mucho más importante en el Mundo Según Carrie Bradshaw.

¿Quién vota por que Carrie deje el grupo?
A medida que me he hecho viejita y las experiencias se acumulan en la mente y el cuerpo, la desgastada serie con su desgastada protagonista se quedan pegadas en una mentalidad materialista, desechable y por sobre todo ultra egoísta con todo lo que ocurre fuera del estilo de vida que retrata. Sex and the City llevó a tal extremo el asunto de mostrar la vida top que fue involucionando todo el universo de su protagonista en una gran lista de accesorios: amistades, relaciones, trabajos, prendas. Todos con el mismo valor y trato, intercambiables y descartables ante la primera imperfección o dificultad.

El personaje de Samantha Jones, aunque después de la última película (tiempo que nunca recuperaré) termina siendo más una caricatura de sí misma que un tótem de seguridad sexual, se salva un poco sólo por el hecho de ser inquebrantablemente constante en su actitud tan segura y provocadora. Un poco mucho, pero consecuente al fin de cuentas. No sé ustedes, pero lo que es yo ojalá que a los treinta sea mucho más parecida a Miranda, o incluso  Charlotte (Samantha es alguien que en el dormitorio no está de más usar como inspiración) no una bala suelta, egocéntrica y pasada a rollos como la protagonista de la serie, quien se niega a crecer a pesar de las arrugas.




CONVERSATION

4 ya son Blogger@s:

  1. concuerdo con todo lo que dices, creo que hace mucho tiempo deje de querer ser Carie y me volví fan de Charlotte, que junto a Miranda si son las verdaderas heroínas, reales y totalmente incorporadas a lo que es el sentido de una vida, donde los logros o fracasos se asumen y se comparten con tus seres queridos, que eres capaz de tener un matrimonio y no morir en el intento y si mueres eres capaz de perdonar.

    Me encanto tu critica, muak

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  2. Yo creo que está serie intento convertir al hombre en un objeto, en un intento de venganza?, no lo sé, pero no me simpatiza mucho...

    A las chicas les maravillo ver que eran fuertas realmente en lo emocional, marital, etc etc... Sin embargo mostraron que era un talento el engaño, el sexo sin remordimiento, etc etc y eso aunque no convence, influencia a muchas mujeres...

    saludos y buena entrada

    PD: un 2 a lo pasalacual para sex and the city

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  3. Nunca vi la serie pero vi las películas para acompañar a mi ex... y la verdad es que no entendía mucho pero creo que llegué a captar algo muy parecido al análisis hecho aquí. Claro que la persona que me acompañaba no concordaba con mi opinión =P

    En un libro leí que a los seres humanos en general nos gusta el drama, las cosas que nos pasan no son buenas ni malas, solo es como nos afectan lo que lo define, y hay personas que buscan ser victimas ante cualquier situación...

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  4. Yo me pegue mi maraton de la serie recien el año pasado, ya que por esas casualidades de la vida pille la primera pelicula en el cable y quede enganchada con la historia. 

    Debo decir que para mi, mi personaje favorito siempre fue Miranda, era a ella cuya historia encontraba mas interesante y a la que encontraba mas real de todas, mas cercana e identificable. Charlotte me caia pesimo, y me tenía harta su desesperacion y que anduviera todo el rato con el vestido de novia en la cartera. A Samantha la admiraba y yo creo que todas las mujeres han deseado en su interior ser un poquito como ella. Y Carrie, pues a Carrie me daban ganas de cachetearla a veces... como que sentía que le faltaba su buen "acomode de neuronas" porque como tan idiota de abandonar a Aidan por Mr Big!!! aparte que era taaaan pasada a rollo!! Me sulfuraba.

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