Ser o no ser... ese es el problema.

Sí, a veces soy tímida. Pero el decir “ser algo” siempre se me complica. Creo estar en contra de esas categorizaciones, muchas veces necesarias, por el hecho de restringir la libertad del cambio. 

Un profesor de psicología, muy seco según mi subjetivo punto de vista, cerró una clase mostrándonos que no existían las personas tímidas, extrovertidas, miedosas, etc., aludiendo a rasgos de personalidad, entre otras cualidades. No existen tales características, sino que existen las circunstancias o causas que hacen que las personas se comporten o reaccionen de tal manera. 


Otro profesor, identificado con otra teoría, enseñaba que los rasgos que nos caracterizaban no coincidían necesariamente con lo que somos, ya que sólo son la fachada de la casa, la máscara que usamos para relacionarnos con el mundo. Detrás de ésta se encuentra lo que de verdad somos. Pero ¿qué somos?

Por ahí escuchaba que somos todo. Lo bueno y lo malo, lo que queremos ser y lo que odiamos, lo que debemos ser y lo que no queremos ser. Somos nuestro héroe y nuestro enemigo al mismo tiempo. ¿No han odiado alguna reacción de ustedes en algún momento? ¿No se han preguntado, por qué no hice o dije esto otro? ¿Somos entonces realmente nuestras reacciones, o también somos nuestras reacciones ideales?

Foto de Color me Katie

Me quedo con ambas ideas de mis profesores. Creo que no soy tímida, sólo que algunas circunstancias me hacen reaccionar de esa manera. Si estoy rodeada de gente que no habla, buscaré puntos de encuentro y que nos comuniquemos, pero si me rodeo de gente extrovertida y narcisista, me retraigo un poco para escuchar y observar. ¿Eso es suficiente para que se me etiquete siempre como tímida? No me identifica tal etiqueta.

Creo que podemos serlo todo. Podemos ser simpáticos, pesados, agresivos, pacifistas, habladores, callados, generosos, egoístas, reservados, etc. Como dijo alguien… somos la casa entera, pero nos enfocamos más en algunas habitaciones.




CONVERSATION

7 ya son Blogger@s:

  1. Muy interesante el tema, la verdad también pienso que podríamos ir desde ambos puntos de vista, otra cosa me encuentro acertada es que somos ayer y hoy, pues yo ahora soy pero mañana seré yo a lo mejor mejorada, con vivencias, experiencias, cambios de actitud, y claramente no seré lo que era pero seguiré siendo yo, ese yo que te define como tu nombre LMM, lo malo de ser tener identidad es que si uno mejora una actitud, cualidad característica o que se yo por la vida, las personas tardan en darse cuentas y siguen pensando que eres en este caso tímida, aunque mejoraras como reaccionar frente a situaciones al resto le tomaría más tiempo decir a ella es extrovertida, bueno da para pensar mucho, buena entrada, me gusto mucho

    ResponderEliminar
  2. Quizás lo que somos dura solo un instante, el presente. En el pasado fuiste de muchas formas y de ti depende si en el presente quieres seguir siendo de esa forma o cambiar y ser algo distinto.

    Una de mis frases favoritas de Coelho es: "Todos los días Dios nos da un momento en que es posible cambiar todo lo que nos hace infelices. El instante mágico es el momento en que un sí o un no pueden cambiar toda nuestra existencia."

    ResponderEliminar
  3. Me encantó tu entrada, justo le comentaba a una amiga que nunca nadie es 100% bueno ni 100% malo, sólo que hay ciertos aspectos buenos y/o malos que serán más tomados en cuenta por el resto, tal como tu lo describes, de acuerdo a las circunstancias. Hitler fue venerado y amado por su pueblo, considerado un héroe que sacó a Alemania de la pobreza en que se veía sumida a comienzos del siglo XX, mientras que el resto del mundo se agarraba la cabeza ante tamaña estupidez de orden ideológico de querer engrandecerse como nación y raza a costa de los demás.

    Una vez más, excelente entrada, no tan sólo en contenido, sino que también la encontré muy bine escrita.

    ResponderEliminar
  4. Me pasa en situaciones de confrontación que horas después me pregunto ¿porqué no respondí así cuando esta persona me dijo esto? o ¿porque no confronté su agresión en lugar de dejarla pasar? no me considero una persona tímida, pero si soy pésima para la confrontación, especialmente con gente que quiero, y tampoco tengo la personalidad para -por ejemplo- colarme en una fila o decirle a un colado que se vaya a hacer la fila...esas situaciones simplemente me superan.

    ResponderEliminar
  5. Creo que tendemos al acto en sí. Me explico, es difícil ser alguien en el pensamiento, el acto nos define socialmente. Pero al mismo tiempo mutamos constantemente, así que dejamos de ser cada vez que somos (creo que no me expliqué... puedo enredarlo más si quieren, jajaja). Un acto no nos hace, pero nos da directrices de lo que podemos ser, a veces luces y otras oscuridades. Definitivamente el tema es LO complejo, así que lo dejo hasta aquí.
    Buena onda la entrada.

    ResponderEliminar
  6. Cuanta verdad hay en las teorías de tus profesores!
    Las personas somos y actuamos de forma distinta dependiendo de las circuntanciás en gran parte y lo que esta súper influenciado por las experiencias que hayamos tenido, la sociedad donde nos desarrollamos y un largo etc de factores determinantes, por ello siempre es bueno estar abierto a los cambios :)
    Saludos!

    http://somoschicasmimadas.blogspot.com/



    ResponderEliminar

Todo comentario que no tenga relación con el post o sobrepase los límites de la libre expresión, será moderado y no saldrá publicado.

Back
to top